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Desde este espacio los invitamos a pensar, tanto los acontecimientos políticos como las producciones filosóficas y espirituales de nuestro continente y del Mundo Islámico, más allá de los presupuestos ideológicos a partir de los cuales se construye "la realidad" desde los medios masivos de comunicación y de los que se nutren, también, las categorías de análisis de buena parte de la producción académica.

Esperamos sus aportes.

lunes, octubre 10, 2011

El Islam en Filipinas.



El Islam, en el origen de Filipinas



La presencia del Islam en el Archipiélago Filipino tiene su origen en el proceso de islamización que en el Sudeste Asiático tuvo lugar como consecuencia de las rutas comerciales que unían los puertos musulmanes de Oriente Próximo con China. El Sudeste Asiático, en un principio zona de paso, fue atrayendo el comercio como mediador regional siendo el Islam la base de la legitimación política. Así es como surge el sultanato como institución en el mundo malayo peninsular (Malaca) y se va exportando paulatinamente hacia el mundo insular y oriental del Sudeste Asiático, hasta llegar al extremo oriental que representa el Archipiélago Filipino.

Cuando los españoles llegan a esta región con la decisión de controlarla, Miguel López de Legazpi realiza un juicio de la situación humana del archipiélago con el fin de informar al rey de las posibilidades de éxito político:

“ En esta ysla [Luzón] ay muchas provincias y en cada una de ellas hay diferente lengua y costumbres ― la mayor parte es de moros mahometanos y otros indios que se pintan, que adoran a sus pasados, invocan el demonio ― no tienen Rey natural ― señorean la tierra señores particulares ― los mas ricos de ellas, tienen guerras unos con otros y se captivan y se hazen esclavos y venden de unas provincias á otras […] Estos naturales seran faciles de convertir a nuestra santa fee catolica porque casi todos son gentiles sacando los de borney y luçon que son moros por la mayor parte y algunos principales que an convertido en estas islas y aun estos tienen poca noticia de la ley que tomaron mas de circuncidarse y no comer puerco ― pero los gentiles estan sin ley y no tienen templos ni ydolos ni sacrificios y fácilmente admiten lo que se les dize y persuade ― tienen algunas supersticiones y de no hazer cossa ninguna sin que primero echen suertes y otras miserias que todo sera facil de quitarles aviendo rreligiosos que sepan la lengua y les prediquen.”

(Miguel López de Legazpi, Relación de las Islas Filipinas, 1570 [AGI-Sevilla: FILIPINAS, L1-1-2/24]. Edición en Wenceslao E. Retana, Archivo del Bibliófilo Filipino. Recopilación de documentos históricos, científicos, literarios y políticos y Estudios Bibliográficos, Madrid, Librería General de Victoriano Suárez, 1898, vol. V, p. 39. y p. 24)

Pero el proceso de institucionalización política que el Islam estaba adquiriendo en el Archipiélago Filipino, con la creación del Sultanado de Sulú a comienzos del siglo XV, el de Mindanao poco después, y el liderazgo de una familia bornea en la bahía de Manila, hacían que el Islam no sólo fuera competencia para los objetivos españoles, sino también una evidente oposición. Es por ello que parte de los autores españoles empiezan a contemplar a los musulmanes filipinos como se contemplaba a los musulmanes españoles, es decir, dentro de una misma campaña en la que el “Moro” es el Otro, apareciendo varios arbitrios y debates en torno a la personalidad jurídica y antropológica de los musulmanes en al Archipiélago.

Los españoles lograrán controlar las áreas en la que el Islam no estaba implantado con la suficiente institucionalización política como para oponer resistencia. No obstante, no sucederá lo mismo con los sultanatos de Sulú y Mindanao en donde, tras la aparición de los españoles y el colapso del comercio regional que estaba en manos de los musulmanes, se darán las condiciones idóneas para la perpetuación de las estructuras basadas en el tráfico de esclavos. Así, dada la fugacidad de la frontera, las agresiones y ataques para obtener cautivos va a ser no sólo la legitimación de la numerosa aristocracia musulmana, sino también el modo de calibrar su riqueza, en razón del número de esclavos y partidarios.

No son numerosas las fuentes históricas filipinas anteriores al siglo XVI, por lo que la reconstrucción del mundo pre-hispánico en el Archipiélago Filipino muchas veces debe hacer uso de ciencias auxiliares a la historia, o de fuentes extranjeras que mencionen de algún modo el Archipiélago. En este sentido, son de vital importancia las fuentes chinas para calibrar el proceso de desarrollo político en el sur filipino antes de la llegada de los españoles, dado el contacto diplomático entre Sulú y China. Por lo que se refiere a las fuentes árabes, lamentablemente los datos que se pueden extraer son circunstanciales y de difícil identificación.

Para analizar el proceso histórico-cultural del Islam filipino contamos con dos tipologías de fuentes escritas: 1) Fuentes de creación interna: TARSILA; JAWI; KHUṬBA; KITĀB; y 2) Fuentes de creación externa: principalmente la documentación española, portuguesa, inglesa, holandesa, francesa, alemana y norteamericana.

El Islam representa históricamente el primer motor cultural en el Archipiélago Filipino, y cultura islámica ha tenido un papel determinante en la constitución del mundo insular. A pesar de ser actualmente Filipinas considerada el único país mayoritariamente cristiano de Asia, representa igualmente el extremo más oriental del mundo islámico clásico. Además de elementos religiosos, los filipinos han usado elementos culturales islámicos para construir su proceso civilizacional, siendo el Islam una parte consustancial de la construcción de la Filipinas moderna.

Isaac Donoso Jiménez, licenciado en Filología Árabe y doctorando por la Universidad de Alicante, Actualmente Profesor en la Philippines Normal University.

Fuente: www.araboislamica.blogspot.com