
Unidad Sunni – Shiah
En tiempos en que ciertos sectores históricamente marginales del Islam, hoy sostenidos por el poder del dinero, intentan extender su pobre y tosca visión de nuestro precioso camino, es necesario no olvidar la urgencia que, como musulmanes, tenemos de unirnos frente a los intereses de los opresores de turno. Recuperamos así las palabras de Mahmud Shaltut, quien fuera Shaij de Al Azhar entre 1958 y 1963, con respecto a
Oficina del Shaij de
En el nombre de Dios, el Clemente, el Misericordioso.
Texto de
Promulgada por su Eminencia el gran maestro Shaij Mahmud Shaltut, Shaij de
Se ha preguntado a su Eminencia:
“Algunos piensan que el musulmán debe seguir una de las cuatro escuelas jurídicas conocidas a fin de que su culto y sus prácticas sociales (mu’amalat) sean ejecutadas correctamente. Ahora bien, ni la escuela jurídica shiíta ni la escuela jurídica Zaidita figuran entre las anteriormente citadas cuatro escuelas conocidas. ¿Es vuestra Eminencia de esta opinión y prohíbe seguir la escuela jurídica shiíta imamita duodecimana, por ejemplo?”.
Su Eminencia ha respondido:
1- El Islam no obliga a ninguno de sus adeptos a seguir una escuela jurídica precisa pero dice: todo musulmán tiene ante todo el derecho a seguir toda escuela jurídica transmitida correctamente y cuyos estatutos estén registrados en sus propios libros. Aquel que ya siga una de estas escuelas jurídicas, puede, legalmente, escoger otra.
2- La escuela jurídica ya’farita, conocida bajo la apelación de escuela jurídica shiíta duodecimana puede ser seguida al mismo nivel que cualquiera de las otras escuelas jurídicas sunnitas.
Los musulmanes deben, por lo tanto, saberlo y desembarazarse del fanatismo sin fundamento por escuelas jurídicas específicas; pues ni la religión de Dios ni su Shari’a son propiedad de una escuela jurídica precisa, ni limitadas a una escuela jurídica en particular. Todos (los fundadores de las escuelas jurídicas islámicas) son mujtahids admitidos por Dios. Aquel que no se estime suficientemente competente para juzgar él mismo y ejercer un ijtihad personal puede seguirles y aplicar lo que ellos deciden en su jurisprudencia. Esto es válido tanto para el culto como para las prácticas sociales (mu’amalat)”.
Firma: Su Eminencia Shaij Mahmud Shaltut, Shaij de Al Azhar
Fuente: El sunnismo y el shiísmo: una querella artificial y una provocación pérfida. Editorial Al Hoda, Teherán, 1989.